La estimulación cognitiva se puede definir como el conjunto de actividades que tienen como objetivo fundamental mejorar el rendimiento y la eficacia de las distintas capacidades mentales.
Estas actividades variarán dependiendo de la edad y de las circunstancias de cada chico. En todo caso, se pueden establecer ejercicios y actividades de estimulación en niños de muy corta edad que faciliten la aparición de los procesos evolutivos naturales.
La mejor estimulación debe comprender el máximo número de sentidos o canales posibles (vista, oído, tacto…) y utilizar variado material: juegos, cuentos, cuadernos de actividades, son algunos de los elementos que podemos utilizar. La música y el movimiento son elementos muy importantes a la hora de estimular.